Todas las Moradas constan de Dios Padre, Jesucristo, tipo (forma) de Oración, hay un cambio personal (en consecuencia) y una acción.
Es importante remarcar que el entrar y salir a cada rato de las diferentes moradas, es normal. No debe ser. Pero nuestra condición humana nos hace luchar para tratar de llegar con la mayor perfección posible para poder seguir a J+C. Al entrar a esta Morada, debemos estar decididos a seguirlo, con perfección.
Esta Morada nos remite al relato del joven rico (Mt 19, 16-22).
Debemos dedicar con orden (disciplina) un horario fijo para la Oración, que a estas alturas, es Oración de Recogimiento.
Santa Teresa presenta estas terceras Moradas como la culminación del camino ascético que recorre el ser humano para llegar a su Morada Interior. La persona debe ser vigilante y esforzarse, debido a que el enemigo acecha siempre y trabaja para sacarlo del camino. Son las Moradas de la fidelidad en la prueba. Es la gracia de la prueba.
No debemos olvidar que Dios responde a los esfuerzos ascéticos. Y, su actuación no es la que el Alma espera, no premia ni aprueba, sino que prueba.
Dios inicia su ofensiva, develando la verdad de su vida. El camino a seguir es dejarse conducir por DIOS. Es dar la propia persona (ser) con Amor limpio, sin interés, por EL (DIOS) solamente.
Bibliografía.
Entre las muchas obras existentes cito:
Obras completas de Santa Teresas. Editorial de Espiritualidad,
Acercar el cielo. Antonio Mas Arredondo
Introducción al Castillo Interior de Teresa de Jesús. Maximiliano Herráiz García.
Teresa de Jesús, Una aventura interior. Montserrat Izquierdo Sorli
